El pasado 2 de abril se publicó en el BOE, el Real Decreto 312/2005, de 18 de marzo, por el que se aprueba la clasificación de los productos de construcción y de los elementos constructivos en función de sus propiedades de reacción y de resistencia frente al fuego. Dicho Real Decreto que entrará en vigor el 2 de julio de 2005,traspone a la Legislación Española, el nuevo marco regulador Europeo referente al comportamiento ante el fuego de los productos de construcción, es decir, reacción al fuego, resistencia al fuego y propagación del fuego exterior.
La importancia de esta disposición estriba en que supone un gran cambio regulador, al establecer unos nuevos parámetros, unos nuevos valores y unos nuevos métodos de ensayo y evaluación de las prestaciones de fuego de los productos y elementos constructivos, con incidencia en todos los agentes que intervienen en el proceso constructivo.
Además, esta regulación va a servir de puente para los temas de fuego entre las anteriores reglamentaciones y el nuevo marco regulador que va a suponer el Código Técnico de la Edificación, que en poco tiempo será aprobado y publicado por el Ministerio de Vivienda. Este Real Decreto estaba siendo reclamado por los agentes implicados (fabricantes de productos, constructores, laboratorios, etc.), ya que esta regulación afecta al comportamiento ante el fuego de los materiales de construcción.
Con anterioridad a las nuevas regulaciones europeas en la materia, en España ya existía una normativa, que a partir de ahora habrá de adaptarse a los sistemas europeos. Además, tendrán que establecerse unos criterios de equivalencia entre los valores de los parámetros existentes y conocidos hasta el momento y los nuevos parámetros y valores europeos, que permitan y faciliten a los sectores y agentes implicados la adaptación y la comprensión de esta transformación técnica.
También se establecen ciertos criterios para las actuaciones de los laboratorios que ensayan estas prestaciones y los certificados que emiten, y que son uno de los agentes protagonistas de esta adaptación.
En síntesis, se trata de adaptar la normativa española a las nuevas reglamentaciones de la Unión Europea relativas a los temas de fuego con la vista puesta en la armonización técnica, la eliminación de barreras técnicas al comercio y el Mercado Único Europeo.
Documentos Adjuntos